09 de July, 2023
Sé que es complicado, que buscar ayuda no es sencillo, que las emociones se desbordan, que sientes demasiado o simplemente ya no sientes nada, que intentar una y otra vez agota, que tocar la puerta de un profesional y otro agobia, que luchas contigo mismo, que te esfuerzas por mejorar y sientes que no lo logras, que las personas en general no se dan cuenta de lo difícil y cansado que es estar en un estado mentalmente oscuro, depresivo y angustiante, que a veces piensas que no hay nada que llene el vacío.
También sé que es difícil tomar la decisión de buscar ayuda, que muchas veces lo postergas, que dudas y a veces sostienes que no lo necesitas. Está bien dudar, solamente te ruego por favor no te rindas, haz un esfuerzo más, un intento más, pero no te rindas.
Ir a terapia es tan solo el primer paso detrás de este trabajo, pero es uno muy importante, en ella encontrarás un profesional con quién construirás una relación estrecha de confianza, cooperación, comprensión y compromiso en donde la comunicación es un instrumento fundamental, un profesional que te ayudará a tratar tus problemas emocionales, psicológicos y de conducta, que te dotará de las herramientas que necesitas para que te hagas consciente y reflexiones y te responsabilices sobre los sucesos de tu vida, lo que te dará capacidades para mejorar tus dificultades. Tu terapeuta promoverá cambios profundos en tu manera de pensar y mejorará tu calidad de vida. La terapia es un lugar en donde tendrás la libertad de hablar de tus sentimientos, miedos, experiencias, vivencias reprimidas, podrás cuestionar tus creencias y expresar tus dudas e inquietudes y hablar de cualquier tema que desees sin ser juzgado; en tu psicoterapeuta encontrarás una mirada objetiva y externa que te ayudará a medir el impacto que tienes en los demás y también a analizar otros puntos de vista que quizá no has tenido en cuenta.
Sin embargo, ir a terapia no es fácil, se necesita mucho valor para hacer una introspección que te lleve a conocerte, a encontrar tu camino y las motivaciones profundas con las que establecerás nuevas metas o te ayudarán a alcanzar algunas que dejaste en el olvido, allí tendrás que enfrentarte a tus pensamientos recurrentes, identificar y nombrar tus heridas, observar los patrones de conducta que te llevan a repetir la experiencia, mirar de frente tu dolor y adquirir un compromiso contigo mismo, porque todo depende de tu dedicación y deseo de curar. El terapeuta será tu guía, tu aliado, una persona que puede socorrerte en momentos difíciles, te ayudará a desarrollar estrategias para entender tus problemas y te enseñará a comprender y regular tus emociones, será una persona con una linterna que te orientará en un camino que tú decidirás tomar y recorrer para salir de esas situaciones frustrantes y dolorosas que se han vuelto paredes emocionales impenetrables rompiéndolas ayudándote a retomar tu vida, alguien en quien confiar, que te brindará su apoyo y cercanía mientras te acompaña en tu proceso.
Durante tu curación sentirás tristeza, ira y confusión, pero serás contenido, respetado y confrontado. No siempre saldrás bien de cada sesión porque estás aprendiendo a aceptar y a responsabilizarte de tu vida, pero quiero recordarte que todo se va a acomodar, que eres más fuerte de lo que crees, que estás en el lugar indicado. Así que, si estás en el proceso o ya lo lograste, quiero decirte que estoy orgullosa de ti y que, aunque las cosas no vayan como esperabas, vas a sanar.
Quiero que sepas
que eres valiente por luchar por tu bienestar, por esforzarte por salir de ese estado
mental oscuro ya sea por ti mismo o con
ayuda, que nadie sabe lo que estás viviendo hasta que no lo dices, que nadie va
a poder ayudarte si no cuentas lo que sientes, que contar lo que sientes y lo
que piensas alivia y te ayuda a descargar peso, porque por fin entendiste que la
salud es mucho más que comer sano y hacer ejercicio, porque también influye en
tu bienestar lo que estás pensando, sintiendo y diciendo, que hablar sana y que
luchar acompañado, fortalece.
Bienvenido a tu espacio seguro,
Catalina Zamora
Robledo
Psicóloga.
Twitter:
@medicencata
Esta columna de opinión es exclusivo pensamiento de su
autor(a) y en nada compromete la línea editorial de este medio de comunicación.